sábado, 25 de julio de 2015

Conoce la postura correcta en una silla de ruedas





El objetivo de una silla de ruedas es dar al usuario mayor funcionalidad, movilidad y sobretodo comodidad. Para llegar a esto, hay que adaptar ciertos componentes de la silla a la persona. De otro modo se puede perder el equilibrio y tener una mala experiencia  en el caso  que el usuario la usará transitoriamente o en el caso contrario, donde se tiene que usar la silla por un mayor periodo de tiempo, como lo son las personas con movilidad reducida,  ancianos, o personas que han sufrido alguna fractura, por ello hay más de una razón para que la silla de ruedas sea lo más cómoda y adecuada posible.
Si esto no es así el resultado será, que la energía del usuario se malgastará de manera innecesaria debido al esfuerzo continuado por modificar su postura.
Una silla de ruedas inapropiada puede incluso provocar una discapacidad extra. A menudo se considera que lo que más afecta a la maniobrabilidad de la silla son su peso y el material con el que esté hecha su estructura. Sin embargo, hay factores más importantes como el asiento y la postura que de él se derive, la distancia entre ejes de las ruedas, la posición y el tamaño de las ruedas, incluso la forma en que la silla ha sido ajustada o montada, que pueden influir decisivamente en la funcionalidad y movilidad del usuario.

La postura correcta en la silla de ruedas tiene comprendido:
  • Rodillas y cadera en un ángulo correcto y equitativo
  • Glúteos en la parte posterior del asiento
  • Glúteos centrados en el medio del asiento
  • La pelvis con una inclinación leve hacia adelante para que brinde movimiento
  • Pelvis sin inclinaciones laterales.
  • Hombros relajados
  • Brazos libres
  • Cabeza recta con cierta inclinación de la barbilla hacia abajo para permitir el correcto movimiento cervical.
  • Los pies deben estar libre y paralelos al piso
  • Sentarse erguido en una posición sentada simétrica
  • Conseguir la máxima capacidad funcional con el mínimo gasto de energía
  • Reducir la presión que soporta en las nalgas y muslos, con algún cojín anatómico o blando, previniendo de esta manera las heridas por presión. 

Nunca olvides que es muy importante saber asesorarse correctamente, antes  de elegir un producto ortopedico, para asi evitar problemas anexos al que uno ya presenta. 


Escrito por Ortopedia Inse

miércoles, 15 de julio de 2015

Para qué sirven los cambios posturales en pacientes postrados





Se entiende por necesidad de movilización a la capacidad para mover cada una de las partes del cuerpo y de trasladarse de un sitio a otro conservando una correcta estabilidad y alineación corporal.

El correcto funcionamiento del sistema muscular  es fundamental para poder cubrir satisfactoriamente la necesidad de movilización, pero también van a intervenir en ello otros elementos como el estado psicológico del individuo, la existencia o no de patologías, las limitaciones funcionales que presenta, la presencia de otras personas que puedan ayudarle en la satisfacción de esta necesidad en el caso de que no pudiera por sí solo, las barreras arquitectónicas, etc.
La realización frecuente de movilizaciones produce en el paciente efectos muy positivos en los ámbitos anatómico, fisiológico y psicológico. Entre estos efectos, podemos destacar los siguientes:
  • Mejora la condición muscular del paciente, con lo cual se produce una mejor conservación de la masa muscular y se previenen atrofias, se lentifican los procesos de desmineralización ósea y se favorece la función cardiovascular y respiratoria.
  • Evita que el organismo mantenga durante un espacio prolongado de tiempo malas posturas corporales que podrían dar lugar a deformidades y a presiones sobre ciertas prominencias óseas ocasionando la aparición de úlceras por presión.
  • Favorece la independencia del paciente al mejorar la movilidad del paciente; esto le permitirá llevar a cabo por sí mismo actividades de la vida diaria como asearse, ir al baño, vestirse, etc
  • El momento de realizar la movilización se aprovechará también para llevar a cabo otras actividades como realizar masajes, valorar el estado o integridad de la piel, revisar las zonas de presión, etc.
  • Para conseguir que las movilizaciones generen efectos beneficiosos es necesario realizarlas cada tres o cuatro horas. Como norma general, todas deben realizarse siempre de forma suave y rítmica, intentando que el paciente colabore.
Escrito por Ortopedia Inse

miércoles, 1 de julio de 2015

Neuroma de Morton



Degeneración del nervio digital plantar con engrosamiento alrededor de este. Normalmente se localiza entre el 3º y 4º dedo, aunque también aparece entre el 2º y 3º, en  muy raros casos puede aparecer en otra posición. Más frecuente en mujeres que en hombres, presentándose a cualquier edad.
La causa del neuroma de Morton es la irritación por la compresión del nervio interdigital que pasa por las cabezas metatarsianas. Esta irritación puede producirse por una sobrecarga en esta zona y/o por tener la musculatura posterior de la pierna acortada, los gemelos por ejemplo. El uso de zapatos estrechos y de tacón también son favorables para la aparición del neuroma de Morton.

Los síntomas son dolores mecánicos, es decir cuando caminamos, similar a una descarga eléctrica que va aumentando durante el día y en algunas actividades como correr o caminar. El dolor dependerá también del calzado utilizado empeorando cuando el zapato es de punta estrecha.

Actualmente se aconseja inicialmente a utilizar calzado con horma más ancha en la zona de los dedos y evitar tacones. Posteriormente se pueden realizar estudios biomecánicos y/o la fabricación de plantillas hechas a medida que eliminen la sobrecarga de la zona.




Aunque el  tratamiento conservador suele ser efectivo, existe un 30% donde se deberá llevar a cabo la intervención quirúrgica para resolver este problema.

Escrito por Ortopedia Inse

¿Cómo se regula un caminador?

Muchas personas en la actualidad tienen problemas en la marcha, perdida del equilibrio, que hace que sea necesario la utilización de ...